Parque Natural Cabo de Gata-Níjar
Todos hemos oido hablar del Cabo de Gata, un Eldorado para el turismo de playa. Cabo de Gata es más que esto, es el primer espacio marítimo-terrestre protegido de Andalucía. Debido a los contrastes existentes entre el medio marino, el litoral y el terrestre, a las numerosas especies exclusivas que albergan y a las características propias de uno de los ecosistemas más áridos de Europa, este espacio es también reconocido internacionalmente como Reserva de la Biosfera y Geoparque.
Gran parte de la peculiaridad ecológica y paisajística del parque tiene su origen en la ausencia de invierno climático y en su diversidad geológica.
Cabo de Gata-Níjar cuenta con una impresionante fachada litoral con abruptos acantilados a los que suceden playas urbanas como la de San José y Aguamarga; magníficas playas naturales como Mónsul y Los Genoveses; recónditas y casi inaccesibles calas como Carnaje y de Enmedio; y espectaculares acantilados volcánicos y arrecifales como Punta de los Muertos y Mesa Roldán.
Los suelos pobres y poco desarrollados, debido a la falta de lluvia albergan uno de los conjuntos más singulares de flora del continente europeo, con más de 1.000 especies exclusivas, que escalan las abruptas laderas volcánicas. Densas formaciones de esparto y romero tapizan las llanuras o, en la temprana primavera, miles de margaritas de mar tiñen de amarillo los acantilados marinos.
En sus fondos marinos se desarrollan extensas praderas de Posidonea oceánica. La proliferación de esta especie vegetal, similar a un alga verde, constituye auténticos bosques sumergidos en los que vive gran variedad de fauna submarina: cangrejos, pulpos y peces. Enterradas en las llanuras de arena y fango palpita una riquísima y variada fauna que, aunque de pequeño tamaño, es indispensable para el óptimo desarrollo del ecosistema.
La práctica del ecobuceo en estas limpias y transparentes aguas resulta una experiencia difícil de olvidar. También pasear por la superficie del agua con unas gafas, un tubo y unas aletas (snorkel), encima de las praderas de posidonia con su inquietante movimiento es sencillamente estremecedor.
Las salinas de Cabo de Gata concentran gran parte de la avifauna del parque. Multitud de aves como avocetas, cigüeñuelas o chorlitejos encuentran alimento en estas aguas costeras. También es frecuente la presencia de flamencos. A lo largo del año es posible observar más de 80 especies de aves.
Lugares de interes de el Parque Natural de Cabo de Gata: